sábado, 30 de junio de 2012

El hombre que hacia llorar a los arboles.

Seria un buen titulo para un relato de misterio, de bosques umbrios, rozando lo tenebroso, donde se aventurara alguien quizas normal, quizas extraño, que por sus actos, hiciera estremecer los arboles desde la raiz hasta la ultima hoja, una historia de suspenso -como cuando mobbing mediante mis ex-jefes sin tapujos charlaban con otros como me matarian y enterrarian en un bosque, que en los blogs de un diario espanto a mas de cuatro cuando lo narre, lo cual no es secreto pues es prueba de juicio- pero la verdad es simplemente otra mucho mas sencilla.

El hombre que hace llorar y tambien hace sangrar a los arboles es un simple empleado municipal, que desde que importamos -cambio climatico mediante- un clima tropical por verano, con trombas marinas y tornados, han resuelto que hay que podar los arboles de forma distinta. Ya no pueden alzar sus ramas hacia el cielo, graciles, como manos dando gracias por el clima benigno o elegantes bailarines: deben ser cortadas. Y alli va el hombre con una motosierra, serrando de a pedazos las ramitas, ramas, lo que ayer se alzaba majestuoso como estatua vegetal, hoy yace amontonado en tierra.

Las tipas, arbol autoctono de la zona, llora. Ademas de sus flores amarillas, que en el verano dejan caer como una alfombra a los pies, tambien deja caer gotas de agua, un llanto de alegria o dolor constante. Hoy -son los arboles que mas tiempo mantienen las hojas en el otoño- lloraban de pena. A sus pies, estaban sus partes mutiladas, sus ramas, sus brazos de bailarinas, de alabanza al cielo, toscos pedazos esperando ser hoguera. Para sorpresa de varios paseantes, incluida yo, es que las partes cortadas, estaban manchadas de sangre. Sangre vegetal, cerosa, resina. Resina de su corteza interna, roja como la sangre humana. Hasta el patron con el que fluia por las   caras del corte, hasta manchar el suelo se parecia a la sangre.
Incolume, el hombre que hacia llorar y sangrar a los arboles, seguia con su trabajo de destripador....


domingo, 24 de junio de 2012

Como quiera, donde quiera y cuando quiera.

Escribir es como respirar. Algo necesario: tomar algo, transformarlo, darlo. Como inspirar aire, oxigenar tu cuerpo, exhalar. Tan necesario como ello.

Pero asi como es necesario, debo advertir algo: no hay fecha estimada de publicacion, ni material cierto, remitido a una linea, un tema., un texto, fotos,  lo que me guste el dia que decida publicarlo. 
Algunos lo saben, otros no. Mantener este espacio abierto porque me gusta, me lleva mucho trabajo, esfuerzo, y hasta recursos que no son mios en este momento. De modo que lo unico que pido es un minimo de cortesia, no de favoritismos o aplauso facil que es otra cosa.
Si se tiene un blog, es porque le gusta: escribir, subir su trabajo, leer a otros. Si ve una entrada que le parece larga (un plomazo, bah), abstengase de comentar que no tiene tiempo, que es muy largo, que es A o B. Deje un saludo (pase a ver como andabas, que tengas buen fin de semana) o ni siquiera eso si anda tan corto de tiempo: haga de cuenta que ni vino, pero no sabotee, desmerezca o trate que el otro se adapte a lo que le gusta.Si puede decir con total libertad si le gusto o no, no esta de acuerdo, disiente o es objetor de conciencia porque se respeta todo tipo de opinion, menos claro las que atenten contra la vida.

Si tengo un blog es por una cuestion de gusto: mantener mi propiedad intelectual, escribir sobre lo que me mi real gana y voluntad, como sea, donde sea y cuando quiera. Para otras cosas, estan las redes sociales.
Muchas gracias.

miércoles, 13 de junio de 2012

Tierra de penumbras.

En realidad deberia decir, 'Cerrado por varios duelos' pero solo con uno alcanza como para poner el cartelito y por un tiempo dejar que el silencio que me rodea me envuelva como una crisalida.
No se si saldre oruga o mariposa; ya se vera a su tiempo, cada cual sobrelleva el equipaje que le toco en esta vida como puede, sabe o quiere... o como le dan las fuerzas.
Si hasta las rocas que el mar azota a diario, terminan partidas y en pedazos, no se puede pedir que siga incolume un ser humano, que resiste el oleaje de la vida en carne viva, sin armadura  y con el cerebro que le toco en suerte como todo equipamiento, podemos darnos el lujo de decir que estamos con la lengua afuera, cansados, extenuados, o que simplemente no damos mas.

Leyendo un mal libro -el escritor deberia dedicarse a escribir, no a la historia debo decir- solo habia una frase rescatable: la tristeza espanta hasta a los amigos. Debo decir que el libro es pesimo, pero la frase es de lo mas acertada. Nada mas que se huela algo de esta, y me cuentan....
Desde que desde este territorio de penumbras, donde se espera acostumbrarse a lo que paso y nos condiciona, lo que pasa y no sabemos como ni con que enfrentarlo del aturdimiento, del dolor o la confusion del shock por lo sucedido, y lo que vendra que no se sabe que es, ni que traera como las olas del mar, solo por ahora quiero estar en silencio. A los amigos que han estado al lado en las buenas y las malas, las de entremedio, gracias.
A los que no, los entiendo, como a la frase rescatable del libro. A su turno, les tocara entender a ellos.
Silencio.